El movimiento antiguerra discute sobre Irán, el Medio Oriente y las guerras de Estados Unidos

Por John Catalinotto

El conflicto en Irán que comenzó con las elecciones presidenciales en junio ha tenido un impacto sobre el movimiento progresista y antiimperialista mundialmente, incluyendo en los Estados Unidos. La falta de un claro entendimiento sobre los eventos ha creado algunas confusiones en las filas antiguerra. Esto es especialmente peligroso luego de que el Vicepresidente Joe Biden el 5 de julio implícitamente diera permiso a un ataque israelita contra Irán. El movimiento antiguerra debe estar alerta para protestar contra cualquier movida en esa dirección.

Cuando gran cantidad de personas tomó las calles en Terán el 15 de junio para protestar la elección del Presidente Mahmoud Ahmadinejad, parecía que era un auténtico movimiento popular, aún cuando la base más fuerte estaba en las partes más opulentas de la ciudad.

Aparentemente los/as jóvenes y las mujeres jugaron un papel muy importante en las protestas. Algunas de las demandas eran por los derechos de las mujeres y otros derechos democráticos que estaban limitados por el liderazgo religioso político de la revolución de Irán. Fue muy fácil para los/as progresistas seculares del occidente identificarse con las protestas.

Pero algunas interrogantes aún quedan.

Si las protestas eran progresistas, ¿por qué todos los políticos imperialistas en Europa y Estados Unidos y sus noticieros capitalistas tomaron el lado de la oposición? Esto es muy extraño ya que los participantes más importantes de la oposición, el candidato Mir Hossein Mousavi y el ex Presidente Ali Akbar Hashemi Rafsanjani, estaban identificándose con el régimen pasado. En ese tiempo, fuentes de Estados Unidos hasta culparon a Mousavi por ser responsable de haber supervisado la explosión en el Líbano en 1983 que mató a más de 200 marinos estadounidenses, ya que él era el Primer Ministro en ese entonces.

Rafsanjani, quien es una de las personas más ricas de Irán, está asociado con el aumento de la privatización de la industria y la banca y con abrir relaciones más amigables con el imperialismo estadounidense. Esto necesariamente incluiría el recorte del apoyo para los movimientos de liberación Hamas y Hizbolá y posiblemente para Siria, y el aumento de la cooperación con Estados Unidos en Irak y Afganistán. ¿Cómo la privatización y la cooperación con Estados Unidos podrían aumentar los derechos democráticos dentro de Irán?

Un análisis serio de estas interrogantes debe incluir un examen de las metas del imperialismo estadounidense con respecto a todo el Medio Oriente y al Asia Central. La administración de George W. Bush utilizó el ataque del 9/11 como pretexto para justificar la agresión militar en toda la región, aunque la meta real era la de conquistar sus mundialmente importantes recursos de energía. Un vistazo a las noticias en la segunda semana de julio muestra que esta estrategia básica todavía permanece.

Las tropas de EEUU aún están en Irak

Algunos titulares engañosos dieron la falsa impresión de que las tropas de EEUU se retiraron de Irak el 30 de junio. Sin embargo, 134.000 tropas aún permanecen en el país. Se retiraron de 142 puestos que se encontraban dentro de ciudades iraquíes, entregando esos puestos a las tropas iraquíes, pero siguen en 320 otros puestos por todo Irak.

En algunos casos, en lugar de moverse, las fuerzas de EEUU e Irak simplemente redefinieron los límites de la ciudad, dejando a las tropas donde se encontraban. Tal fue el caso de la Base Falcón de Operaciones de Avanzada del Ejército de los EEUU, que se encuentra dentro de Bagdad. Ahora, con el establecimiento de un nuevo límite, las 3.000 tropas de los EEUU están “fuera” de los límites de la ciudad.

Las tropas de los EEUU y mercenarios bien pagados están expandiendo y mejorando sus bases en las zonas rurales e incluso construyendo otras nuevas. Aunque la administración de Obama mantenga firme el itinerario anunciado, al menos 50.000 tropas estadounidenses se van a quedar en Irak hasta por lo menos a finales del 2011. Un proyecto de ley sobre gastos de guerra que el Congreso controlado por el Partido Demócrata acaba de aprobar, vierte otros $100 miles de millones a las ocupaciones de Irak y Afganistán. (Información de la página web del experto sobre Irak, Dahr Jamail—dahrjamailiraq.com)

Washington intensifica la guerra en Afganistán y Pakistán

Mientras tanto en Afganistán, el nivel de las tropas de los EEUU ya ha crecido a 57.000 y están esperando llegar a 68.000 durante el año. Según el Servicio Noticiero McClatchy, el general Stanley McChrystal, el comandante principal de los EEUU en Afganistán, dijo el 13 de julio que “cuando rinda su evaluación a la administración de Obama el próximo mes sobre lo que se necesita para derrotar a los talibanes, no va a ser disuadido por las declaraciones de la administración de que no puede disponer de más tropas estadounidenses”.

Gran Bretaña, también ha aumentado su presencia en Afganistán, resultando en la muerte de 15 soldados británicos en las dos semanas que terminaron el 13 de julio. La ocupación afgana está nominalmente bajo el mando de la OTAN. Los líderes europeos han hecho caso omiso del sentimiento popular contra la guerra que se opone al envío de tropas a Afganistán, basándose en la esperanza de una reactivación de la popularidad de EEUU en Europa causada por el Presidente Obama luego de que Bush bajara esa popularidad al nivel más bajo en la historia. El apoyo a la guerra está disminuyendo rápidamente al aumentar las bajas, tanto en Gran Bretaña, como en el resto de Europa y Canadá. Hasta el New York Times ha tenido que admitir que el aumento de efectivos y la actividad militar en Afganistán, con el consiguiente aumento de víctimas civiles, está ayudando al reclutamiento por parte de los talibanes y otras fuerzas de la resistencia. (3 de julio)

Junto al de Afganistán, está el aumento de la intervención estadounidense en Pakistán. Aviones piloteados y teledirigidos son enviados para bombardear y atacar con cohetes objetivos de presuntos “insurgentes”, mientras que el Pentágono impulsa al régimen paquistaní a enviar su ejército a las zonas fronterizas. Ambas actividades han incrementado la muerte de civiles y creado millones de refugiados/as en Pakistán. También ha aumentado el reclutamiento por las fuerzas de oposición, algunas aliadas a la resistencia afgana.

La política estadounidense en Palestina

La política de Washington hacia Palestina ha sido la continuación de su apoyo al estado israelí, a pesar de la negación de Israel de impedir nuevas colonias en la ocupada Ribera Occidental y de su brutal bloqueo de la Franja de Gaza. Está basada en los intereses estratégicos estadounidenses en la región, los cuales dependen del estado israelí como un arma contra cualquier movimiento de liberación o gobierno soberano en la región.

Los medios de difusión basados en los Estados Unidos atacaron las elecciones iraníes llamándolas fraudulentas. Pero recordemos que en cuanto a Palestina, Washington e Israel se negaron a reconocer las elecciones que sabían eran honestas en las que Hamas surgió como partido predominante en 2006. Desde entonces la alianza Estados Unidos-Israel ha usado la fuerza militar y ha negado la asistencia para tratar de sacar a Hamas del gobierno.

Washington no ha cambiado su política básica de ocupación y control desde la sustitución del régimen neo-conservador encabezado por Bush. Por eso es consistente con sus crímenes pasados que los medios masivos corporativos y todos los políticos imperialistas—en América del Norte y en Europa por lo menos—se hayan centrado en el gobierno iraní a causa de las elecciones y hayan elogiado las manifestaciones de la oposición.

Sean cuales sean los motivos de los/as manifestantes en Terán, el motivo de los imperialistas es eliminar la soberanía de Irán y hacer retroceder la revolución de 1979.

Grupo financiado por la NED organiza manifestación contra Irán

Un grupo en los Estados Unidos que se llama Unidos por Irán (United 4 Iran) ha convocado manifestaciones para el 25 de julio para protestar en contra del gobierno de Irán. Dice que las acciones son a favor de los/as jóvenes y mujeres que han participado en las manifestaciones de oposición. El grupo antiimperialista Alto a la Guerra contra Irán (Stop War on Iran) ha respondido y publicado una declaración en la cual revela las conexiones de Unidos por Irán con grupos de financiamiento que están asociados estrechamente con la política del exterior de los Estados Unidos—como la Fundación Nacional para la Democracia (National Endowment for Democracy)—y exhorta a no apoyar estas manifestaciones.

“La nueva amenaza pública contra Irán del Vice Presidente estadounidense Joe Biden subraya los peligros de una nueva guerra en el Oriente Medio y la necesidad urgente de claridad política dentro del movimiento contra la guerra en cuanto a Irán,” comienza la declaración de Alto a la Guerra contra Irán.

“Con sus comentarios del 5 de julio en This Week (ABC), Biden abrió la puerta a un ataque militar cuando dijo que Estados Unidos no impediría un ataque israelí contra las facilidades nucleares de Irán, al llamar tal ataque ‘el derecho soberano’ de Israel”.

Alto a la Guerra contra Irán comenta que algunas organizaciones del movimiento contra la guerra han auspiciado la acción de Unidos por Irán, incluyendo Unidos/as para la Paz y Justicia (United for Peace and Justice), y “les exhorta a ellos y a otras fuerzas honestas del movimiento contra la guerra a que reconsideren su respaldo a estas acciones contra Irán”.

Alto a la Guerra contra Irán exhorta a todos/as a que “salgan CONTRA las guerras estadounidenses actuales y las amenazas de una nueva guerra la semana siguiente en un Día Nacional de Acciones Coordinadas en el sábado, 1º de agosto”. Para leer el texto entero de la declaración y/o para participar, vea stopwaroniran.org.

Correo electrónico: [email protected]