Mundo Obrero
PÁGINA PRINCIPAL : :  ARCHIVO : 2012 : 2011 : 2010 : 2009 : 2008 : 2007 : 2006 : 2005
Correspondencia sobre artículos en Workers World/Mundo Obrero pueden ser enviadas a:
[email protected]

Después del ataque en Samarra

Iraquíes culpan intervención de EEUU por la violencia

Por John Catalinotto

Aún nadie ha revelado evidencia contundente que compruebe quién destruyó el templo en Samarra, Irak, que ha provocado batallas entre las comunidades sunita y chiíta. Pero sin importar quién haya encendido la mecha que destruyó la cúpula dorada, las fuerzas de ocupación lideradas por los Estados Unidos son las responsables por estos asaltos adicionales contra la población iraquí.

Desde el 27 de febrero, cinco días después de la explosión, ninguna organización o estado ha aceptado públicamente la responsabilidad por el acto. Esto de por sí, muestra que quien haya sido el que llevó a cabo tal acto, sus intenciones eran la de culpar a otras fuerzas. Estaba asegurado que tal destrucción incitaría batallas entre las dos principales comunidades árabes en Irak, la chiíta y la sunita. Si estas batallas aumentaran a gran escala, podrían llevar a que Irak se fragmentase en muchos estados pequeños lo cual haría mucho más fácil su manipulación por el imperialismo.

El blogger iraquí Riverbend dijo que Bagdad despertó con la noticia de que “hombres vestidos con uniformes de la seguridad iraquí entraron al templo y detonaron los explosivos, dañando el edificio y dejándolo sin posibilidad de reparación. Varios templos en Bagdad fueron atacados. Yo creo que lo que tiene a todos muy consternados es el hecho de que la reacción fue muy ligera, como si se estuviera esperando.”

Batallas sectarias ocurrieron luego del ataque reportándose que se realizaron por grupos organizados. Se sospecha de las brigadas Badr. Estas brigadas son la milicia del Consejo Supremo de la Revolución Islámica (CSRI), asociada al líder chiíta Gran Ayatollah Ali Al-Sistani. El CSRI colaboró con las fuerzas estadounidenses cuando éstas invadieron y profanaron la ciudad santa de Nayaf para abatir la insurrección liderada por el chiíta Mugtada al-Sadr.

Desde la provocación en Samarra, los noticieros capitalistas de los Estados Unidos han presentado los eventos en Irak de tal manera como para exagerar las diferencias entre las comunidades sunita y chiíta. Sin embargo es algo informativo y al menos alentador, el conocer el contraste entre los reportes de la prensa empresarial y los de los iraquíes tanto dentro como fuera del país que se oponen a la ocupación por los Estados Unidos. Estos indican que en muchos casos se han dado manifestaciones después del ataque con miras a forjar unidad entre los chiítas y sunitas en contra de la ocupación.

Solidaridad chiíta-sunita

El analista Dahr Jamail, un periodista que está en contra de la ocupación quien pasó ocho meses reportando directamente desde Irak, escribió el 24 de febrero que “los sunitas fueron los primeros en ir a las manifestaciones de solidaridad con los chiítas en Samarra, al igual que condenaban los ataques a los templos. Las manifestaciones de solidaridad entre los sunitas y chiítas se dieron en todo Irak, incluyendo a Basra, Diwaniyah, Nasiriyah, Kut y Salah al-Din.

“Miles de chiítas marcharon gritando consignas antiamericanas por toda la Ciudad de Sadr, la región pobre de chiítas en Bagdad, la cual acoge a casi la mitad de la población de la ciudad capital. Mientras tanto en la ciudad de Kut, principalmente chiíta, al sur de Bagdad, miles marcharon gritando consignas contra América e Israel a la vez que quemaban las banderas de los Estados Unidos y de Israel.”

Los noticieros turcos reportaron el 25 de febrero que el clérigo chiíta Moqtada al-Sadr, “públicamente concertó la paz entre líderes políticos y religiosos sunitas. Cuatro jefes del movimiento Sadr hicieron un ‘pacto de honor’ con la conservadora Asocia ción Sunita de Musulmana Eru ditos haciendo un llamado a ponerle fin a los ataques contra los templos, al derrama miento de sangre y condenaron cual quier acto que lleve a la sedición. La reunión también anunció la formación de una comisión para ‘determinar las razones de las crisis con vista a resolverlas,’ a la vez que hicier on un llamado para el retiro de las tropas estadounidenses.”

Moqtada al-Sadr ordenó a su ejército Mehdi que no usara más sus uniformes negros, por miedo a que otros estuvieran disfrazándose como fuerzas Mehdi para provocar confrontaciones armadas entre chiítas y sunitas. A pesar de que al-Sadr se unió en un bloque electoral con las fuerzas reaccionarias CSRI y al-Dawa, las cuales han apoyado la ocupación y se considera que están alineadas a los chiítas en Irán, muchos en la resistencia ven al Ejército Mehdi como al que entre todas las agrupaciones en la comunidad chiíta, sea el que más probablemente se una a los grupos mayoritarios sunitas que están ahora luchando contra la ocupación.

Además de intentar evitar una guerra civil, fuerzas dentro de las comunidades chiítas y sunitas en Irak se están uniendo para rechazar la indeseada y dolorosa ocupación imperialista.

Sami Ramadani, un iraquí exiliado en Bretaña, escribió el 24 de febrero en el periódico British Guardian: “No han sido los símbolos religiosos sunitas en contra de los cuales cientos de miles de manifestantes protestan, sino las banderas de los EEUU. La consigna que los unió el miércoles fue: ‘No a América, no al terrorismo’.

“Los clérigos más escuchados por los militantes jóvenes inmediatamente culparon a la ocupación por el atentado. Estos incluyeron a Moqtada al-Sadr, Nasrallah, líder del Hizbulah en el Líbano; Ayatolah Khalisi, líder de la Congreso de Fundación Nacional Iraquí; y el Gran Ayatolah Khamenei, el líder espiritual de Irán”. Khamenei culpó a los servicios de inteligencia de los EEUU e Israel.

“Junto al Gran Ayatolah Sistani”, siguió Ramadani, “ellos además lo declararon un ‘pecado’ grave el atacar a los sunitas, como también lo declararon todos los clérigos sunitas sobre los ataques contra los chiítas. Fue reportado por la BBC que Sadr hizo un llamado a vengarse contra los sunitas—de hecho, Sadr dijo ‘ningún sunita haría esto’ [bombardear el templo] e hizo un llamado a vengarse contra la ocupación”.

¿Dividir a Irak en tres partes?

La responsabilidad legal de Washington de proteger el templo fue claramente expuesta en una declaración del Tribunal Bertrand Russell que dijo: “La destrucción de la mezquita Al-Askari en Samarra, Irak representa otra violación más de las obligaciones que una fuerza de ocupación militar tiene bajo las leyes humanitarias internacionales”. Estos reglas sobre la guerra y la ocupación fueron precisadas en las convenciones firmadas en la Haya y en Ginebra hace más de 50 años.

La responsabilidad del imperialismo estadounidense, sin embargo, va mucho más allá de la violación de estas reglas. La administración de Bush concientemente publicó mentiras en el intento de justificar la invasión ilegal de Irak. Luego, EEUU erigió un régimen de ocupación para apoderarse del petróleo iraquí y establecer bases militares permanentes y un centro de operaciones para controlar el Medio Oriente y el Asia Central.

En abril del 2003, cuando el Secretario de Defensa Donald Rumsfeld todavía creía que podía forzar a todo Irak aceptar los planes de EEUU a través de una guerra de “sacudida y terror”, los líderes de los EEUU podían haber creído que era posible esta blecer un gobierno títere, débil y sumiso en Irak. A los pocos meses de la ocupación de Bagdad por el Pentágono, sin embargo, la resistencia iraquí dejó claro que la ocupación de los EEUU no sería fácil.

Washington contempló
otras estrategias

Para noviembre del 2003, los comités de expertos estadounidenses ya propon ían que Irak se dividiera en tres partes. Leslie H. Gelb, presidente emérito del poderoso Consejo sobre Relaciones Extran jeras escribió, “La única estrategia viable, entonces, puede ser la de corregir al defecto histórico [de Irak] y moverse en etapas hacia una solución de tres estados: kurdos en el norte, sunitas en el centro, y chiítas en el sur”. (New York Times del 25 de noviembre de 2003)

A finales del 2004, la corporación Rand realizó un estudio para la Fuerza Aérea de los EEUU. Una de las metas principales del estudio era la de “identificar las divisiones claves y descubrir las líneas vulnerables sectarias, étnicas, regionales y nacionales y evaluar como éstas divisiones pueden generar desafíos y oportunidades para los Estados Unidos”.

La Constitución de Irak, escrita por los Estados Unidos, y todas las reglas para seleccionar representantes en las elecciones iraquíes, incluían elementos de esta fragmentación en tres partes. Esta fragmentación institucional fomentó conflictos entre comunidades, aún cuando estas diferencias no eran consideradas significativas en el pasado.

El provocar una guerra civil entre las comunidades en Irak es una acción peligrosa para los EEUU, pero la creciente fuerza de la resistencia ha puesto a los imperialistas en una situación desesperada. Hay evidencia de que los EEUU ya está usando la llamada “opción salvadoreña”, la cuál quiere decir, que EEUU está estableciendo escuadrones de la muerte en Irak para conducir una guerra secreta contra cualquier persona que se oponga a la ocupación.

Cientos de científicos y académicos iraquíes han sido asesinados misteriosamente. Como el periodista Robert Fisk escribió el 14 de julio, 2004, en el periódico británico The Independent, “Las autoridades universitarias sospechan que hay una campaña cuya meta es despojar a Irak de sus académicos para acabar con la herencia cultural de Irak, la cuál empezó cuando América entró a Bagdad.”

John Pace, un oficial de la ONU que salió de Irak a mediados de febrero, le dijo al Independent (27 de febrero) que “muchos de los asesinatos fueron ejecutados . . . bajo el mando del Ministerio del Interior” del gobierno títere respaldado por los EEUU.

Hay elementos en la resistencia iraquí, por ejemplo en el Partido Baath, que se oponen y atacan la intervención de cual quier elemento iraní en Irak, ya sea de grupos pro-Irán como las Brigadas Badr o de agentes iraníes. A su vez, grupos pro-iraníes atacan el papel de los Baathistas en la resistencia.

Esta hostilidad viene en su mayor parte por la guerra entre Irak e Irán de 1980-1988, dos naciones capitalistas oprimidas por el imperialismo. EEUU pudo manipular sus antagonismos para debilitar y atrasar ambos países Medio Orientales. Los pueblos de Irak e Irán tienen interés en vencer esta hostilidad para poder combatir mejor la amenaza directa del imperialismo que ambos enfrentan hoy.

Los aliados de los EEUU en la región, especialmente los británicos, tienen su propia experiencia utilizando la norma de “dividir para dominar” contra las naciones colonizadas. Los británicos fomentaron hostilidades para incitar la partición de la India colonial en India y Pakistán en 1948. En el norte de Irlanda, los colonialistas británicos provocaron violencia sectaria para justificar su ocupación y represión de la comunidad mayormente católica que apoyaba la liberación del dominio bri tánico. Los imperialistas estado unidenses y europeos usaron las diferencias entre los pueblos de Yugoslavia para fragmentar esa república federal socialista en media docena de mini-estados que pueden así ser gobernados más fácilmente.

Y además, la política del gobierno de Israel siempre ha tenido el objetivo de debilitar Irak dividiendo ese país en tres partes y/o dejarlo completamente ingobernable.

La ocupación estadounidense ha traído muerte y destrucción a Irak y no ha podido establecer una sociedad que funcione. Cada vez más gente en los EEUU está consciente de ese fracaso y del horrible costo de la guerra.

Una encuesta hecha por Zogby Inter nacional/Le Moyne College, publicada el 28 de febrero, encontró que el 72 por ciento de las tropas estadounidenses dice que EEUU debe retirarse dentro de 12 meses, incluyendo un 29 por ciento que dijo que EEUU debe retirarse inmediatamente. Una encuesta hecha por la CBS News reportó que solamente un 30 por ciento de la población que respondió aprobaba la política de Bush en Irak.

Ya es más que tiempo para movilizar ese sentimiento popular y obligar a los EEUU a que termine su ocupación de Irak.


: :  MUNDO OBRERO : :  NOTICIAS EN INGLES  : :