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Ilegalidad reinó en juicio a los 5 cubanos antiterroristas en EE UU
Por Javier Rodriguez La Habana, 10 de agosto, Prensa Latina
www.prensa-latina.cu El fallo emitido por la Corte de Apelaciones de
Atlanta confirmó hoy, a ese alto nivel judicial estadounidense la
ilegalidad y manipulación del juicio que condenó a largas penas de
prisión a cinco antiterroristas cubanos. El ingeniero Antonio
Guerrero, los egresados del Instituto de Relaciones Internacionales Fernando
González y Gerardo Hernández, el licenciado en Economía
Ramón Labañino y el piloto René González, se
encuentran presos en diversas cárceles de Estados Unidos. En la
ciudad de Miami, como su aporte a la seguridad del pueblo cubano víctima
del terrorismo, los cinco jòvenes buscaban información sobre los
planes contra la Isla de las organizaciones criminales allí
enclavadas. Su esfuerzo, según dijeron ellos mismos en respuesta a
las acusaciones hechas por el gobierno norteamericano, fue siempre dirigido a
salvar vidas obstaculizando acciones que, como otras anteriores, tuvieron como
blanco objetivos en Cuba. Apresados y colocados en un confinamiento
considerado por abogdos y familiares violatorio de sus más elementales
derechos, fueron llevados a juicio en la ciudad de Miami donde la presión
de las propias agrupaciones terroristas hizo imposible la
imparcialidad. Las solicitudes de la defensa para trasladar el proceso a
otra ciudad se rechazaron por la juez federal de Miami, Joan Leonard quien, el
16 de marzo del 2000, afirmó, sorprendentemente “este proceso
será mucho más interesante que cualquier programa de
televisión”. Los abogados denunciaron que sólo se les
permitió acceso a algunos materiales del sumario, escogidos previamente
por la Fiscalía, mientras a los grupos opositores miamenses le
suministraron otros para explotarlos publicitariamente contra los
acusados. La defensa presentó testimonios de oficiales del Comando
Sur y del Buró Federal de Investigaciones (FBI) reconociendo que los
cubanos nunca afectaron la seguridad norteamericana con sus actividades, pero
eso tampoco impidio la condena. En el ambiente de tensión provocado
por el acto terrorista contra las Torres Gemelas de Nueva York se dictó
la insólita sentencia. Gerardo Hernández fue sancionado a
dos condenas de cadena perpetua más 15 años de prisión,
Ramón Labañino a una sanción perpetua más 18
años, Fernando González a 19 años, René
González a 15 años y Antonio Guerrero cadena perpetua más
10 años. La mediatización de este proceso, la ilegalidad
evidente en un juicio parcializado y la violación del derecho a que los
acusados fueran juzgados en una sede lejana a la de una ciudad bajo la
influencia de los grupos anticubanos, provocaron el fallo de la Corte de
Atlanta. Previamente, un grupo de trabajo de la Comisión de
Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas también
determinó el carácter ilegal del juicio celebrado. Al
determinarse la nulidad del proceso y de las condenas dictadas, la Corte
ordenó a la misma juez Leonard iniciar nuevamente el proceso fuera de
Miami, lo cual ella debe hacer en un plazo perentorio si la Fiscalía no
apela el fallo de Atlanta. Leonard deberá determinar si, como se
supone corresponde legalmente, la anulación de las condenas implica la
liberación provisional de los cinco cubanos como señalan expertos
y juristas o tendrá que fundamentar su mantenimiento tras las
rejas. De todas formas, se abre una nueva etapa en un proceso que, de
acuerdo a la denuncia de La Habana, fue politizado por los grupos anticubanos de
Miami y por el propio gobierno de Estados Unidos.
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